Día del árbol. Poemas y enlaces de interés

Plantemos el árbol. E. E.  Rivarola 

Abramos la tierra, plantemos el árbol,

será nuestro amigo y aquí crecerá, 

y un día vendremos buscando su abrigo

y flores y frutas y sombra dará.

El cielo benigno dé riego a su planta,

el sol de setiembre le dé su calor,

la tierra su jugo dará a sus raíces

y tengan sus hojas verdura y frescor.

Plantemos el árbol, el árbol amigo; 

sus ramas frondosas aquí extenderá,

y un día vendremos buscando sus flores

y sombras y frutas y flores dará.”

Autor: Enrique E. Rivarola

Copiado de:  el libro “La palabra y su mundo”,  Ed. Plus Ultra.

planta un arbol

Abajo, en los Comentarios, podrán leer: Derechos de los árboles;  Árboles pintados por pintores famosos; Día Nacional, Día Internacional, Semana del árbol; Sabiduría Popular, leyendas y creencias sobre los árboles; Sitios con información acerca de los árboles; Beneficios de los árboles y más info. Éstos y otros poemas dedicados a los árboles:  

  • Milonga del árbol, A. Williams-J. Aguirre
  • Canción del árbol del olvido, Alfredo Zitarrosa – Silva Valdés/Ginastera
  • La Higuera. Juana de Ibarbourou
  • El ciprés. Adolfo Pérez Zelaschi
  • Los pinos, Juana de Ibarbourou
  • El soñador de bosques, Gustavo Tatis Guerra
  • El alma del ombú. Silva Valdés
  • El pino verde. Fermín Estrella Gutiérrez
  • Plantando el árbol. Gabriela Mistral
  • Mi amigo el árbol, Tito Sanguinetti
  • El árbol de la vida, gladys nidia chuquimarca

Suerte con la tarea! 🙂

Autor: AcuarelaDePalabras

Lecturas entre amigos...

132 opiniones en “Día del árbol. Poemas y enlaces de interés”

  1. Otro poema leido en PAR* :

    Poema del árbol, Antonio Machado

    Arbol, buen árbol, que tras la borrasca
    te erguiste en desnudez y desaliento,
    sobre una gran alfombra de hojarasca
    que removía indiferente el viento…

    Hoy he visto en tus ramas la primera
    hoja verde, mojada de rocío,
    como un regalo de la primavera,
    buen árbol del estío.

    Y en esa verde punta
    que está brotando en ti de no sé dónde,
    hay algo que en silencio me pregunta
    o silenciosamente me responde.

    Sí, buen árbol; ya he visto como truecas
    el fango en flor, y sé lo que me dices;
    ya sé que con tus propias hojas secas
    se han nutrido de nuevo tus raíces.

    Y así también un día,
    este amor que murió calladamente,
    renacerá de mi melancolía
    en otro amor, igual y diferente.

    No; tu augurio risueño,
    tu instinto vegetal no se equivoca:
    Soñaré en otra almohada el mismo sueño,
    y daré el mismo beso en otra boca.

    Y, en cordial semejanza,
    buen árbol, quizá pronto te recuerde,
    cuando brote en mi vida una esperanza
    que se parezca un poco a tu hoja verde…

    Antonio Machado

    * «Programa de Autosuficiencia Regional (PAR) es una editorial fundada en 1989 que desarrolla proyectos de tecnologías apropiadas como producción orgánica de alimentos, reciclado, energía solar, eólica y de biomasa.»

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      1. pues yo pienso que hay que cuidar la naturaleza y lo que tu dices me parece muy bien porque si no cuidamos la naturaleza entonces ¿de que vamos a vivir?

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    1. me fascina esta pagina porque nos enseña a todos lo importantes que son los arboles y me siento FELIZ QUE ESTE SEA NUESTRO PLANETA . A veces ME PONGO A ESCUCHAR MUSICA Y NO SE COMO DESCRIBIR LO QUE SIENTO. ESO NO LO PUEDO DESCRIBIR. LE DOY GRACIAS A DIOS POR DARNOS EL ARBOL ♥♥♥♥♥♥♥♥♥

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    2. Como el contenido de dicho enlace ha cambiado, copio aquí otros similares que se encuentran disponibles a la fecha:

      (vía http://www.entrerios.gov.ar/CGE/recursosaprender/dia-del-arbol/)

      «¿Por qué se celebra?

      El primer país que instituyó un día en el año para hacerle honor al árbol fue Suecia allá por el año 1840, cuando en esta Nación se tomó conciencia de la importancia que tienen los recursos arbóreos, de la necesidad de enseñarle a los niños acerca de estas plantas, y del cuidado que se les debe brindar y de practicar la conservación de los mismos.

      Años después muchos ciudadanos suecos viajaron hacia Estados Unidos y llevaron con ellos la herencia cultural del día del árbol, lo que trajo como consecuencia que los estadounidenses en 1872 establecieran su día especial del árbol. A partir de allí comenzaron a establecerlo los otros países del continente y del mundo.

      ¿En Argentina?

      En la República Argentina el principal impulsor de la actividad forestal fue Domingo Faustino Sarmiento (Presidente de la Nación de 1868 a 1874) que en un discurso subrayó: «El cultivo de los árboles, conviene a un país pastoril como el nuestro, porque no solo la arboricultura se une perfectamente a la ganadería, sino que debe considerarse un complemento indispensable» y agrega: «La Pampa es como nuestra República, tala rasa. Es la tela en la que ha de bordarse una nación. Es necesario escribir sobre ella ¡Arboles! ¡Planten árboles!».

      Treinta años después, el 29 de agosto de 1900, el Consejo Nacional de Educación, en base a la iniciativa del Dr. Estanislao Zeballos, instituyó esta fecha, en celebración al «Día del Árbol», cuyo festejo se concretó a partir de 1901.

      El Árbol Forestal argentino es el quebracho colorado chaqueño que no debe confundirse con la Flor Nacional que es el Ceibo. Otra fecha vinculada con el Día del Árbol es el Día Forestal Mundial, establecido desde 1971 por la FAO, el 21 de marzo.»

      Leído en: http://www.entrerios.gov.ar/CGE/recursosaprender/dia-del-arbol/

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  2. Por si a alguno le pasa lo mismo que a mí… He notado que los «día nacional» del árbol se celebran en distintas fechas según los países. Aún así -después de buscar y leer en varios sitios- no me queda claro si es correcto que los 29/08 son el día internacional. De modo que si alguno tiene el dato cierto… nos ilustra, please.

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  3. muy bonito los poemas pero yo espero q no solo hoy ni manana se porten bien con los arboles si no siempre porque si no los cuidamos vendra nuestra destruccion nuestros hijos pagaran por nuestros errores Dios los bendiga

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    1. las poesias son bonitas, pero nosotros todos tenemos que cuidar los arboles, si sembramos arboles estamos contribuyendo con la naturaleza.

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  4. HOLA SOY MILADY SALCES CUELLAR Y ME GUSTAN LAS POESIAS Y ME GUSTO ESTA LO QUE FALTA UN POCO DE RIMA LE FALTA ALGUITO BOLIVIA – SANTA CRUZ – EL QUIOR

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  5. Sabías que hace más de 100 años que se celebra en nuestro país (Argentina) el Día del Árbol?

    Todo empezó cuando, gracias a la insistencia y la vocación ecológica del Dr. Estanislao Zeballos, el Consejo Nacional de Educación instituyó, el 29 de agostode 1900, la celebración del «Día del Árbol». En la Argentina de la primera época, el principal impulsor de la actividad forestal fue Domingo Faustino Sarmiento (nuestro presidente entre 1868 y 1874), tan apasionado en todas sus ideas que hasta en un discurso público se refirió a los árboles, con las siguientes palabras:

    «[…] El cultivo de los árboles conviene a un país pastoril como el nuestro, no sólo porque la arboricultura se une perfectamente a la ganadería, sino que debe considerarse como su complemento indispensable […] La Pampa es como nuestra República, tala rasa. Es la tela en la que ha de bordarse una nación. Es necesario escribir sobre ella… ¡Árboles! ¡Planten árboles![…]».

    Suecia fue el primer país en instituir un «Día del árbol». Fue en 1840, mucho antes que en la Argentina, cuando en aquel país ya se había tomado conciencia plena de la importancia que tienen los recursos forestales y del cuidado que se les debe brindar. La institución de este día es muy importante para que todos tomemos conciencia, desde los primeros años de vida, de la responsabilidad que nos cabe en el cuidado de los recursos forestales, sabiendo además que se trata de una tarea a largo plazo.

    Ing. Leandro Altolaguirre – Asociación ALIHUEN Alihuen: Palabra de origen mapuche cuyo significado es «Arbol en pie».

    Leído en villacrespomibarrio/VillaCrespoDigital

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  6. muy bueno el poema mis felicitaciones que no se enteren que lo tome como inventado para la la clase de español. perdon uds no le digan a mi maestra

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  7. muy bonita la letra del poema del arbol, solo espero que tomemos sabiduria de la gran ayuda que nos regalan estos arboles, y que juntos por un mejor ambiente los sembremos y cuidemos no solo este dia sino siempre , iniciemos en casa este cambio de actitud y que nuestros maestros continuen esta hermosa tarea. cuidemoslo es un regalo de nuestro Dios.

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  8. Milonga del árbol
    A. Williams-J. Aguirre

    Es el árbol, un amigo,
    que obliga a la gratitud,
    nos da leña, nos da abrigo,
    nos da cuna y ataúd.

    A su sombra las ovejas,
    se cobijan sin cesar
    y en sus ramas las abejas
    forman panales de miel.

    Los pájaros, arquitectos,
    al árbol, van a planear,
    los complicados proyectos,
    de nidos, para empollar.

    Al árbol, va la chicharra,
    a templar su mandolín,
    y el jilguero en son de farra
    le desafina el violín.

    Ausencia de quien añora
    dice triste, una canción
    al árbol, que luego
    llora con lágrimas
    de compasión.

    ————————————

    Canción del árbol del olvido
    Alfredo Zitarrosa – Silva Valdés/Ginastera

    En mis pagos, hay un árbol
    donde van a despenarse,
    vidalitay, los moribundos
    del alma.

    Para no pensar en vos,
    bajo el árbol del olvido,
    me acosté una nochecita
    vidalitay, y me quedé
    bien dormido.

    Al despertar de aquel sueño
    pensaba en vos, otra vez,
    pues me olvidé de olvidarte,
    vidalitay, en cuantito me acosté.

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  9. La Higuera. Juana de Ibarbourou

    Porque es áspera y fea,
    porque todas sus ramas son grises,
    yo le tengo piedad a la higuera.
    En mi huerto hay cien árboles bellos:
    ciruelos redondos, limoneros rectos
    y naranjos de brotes lustrosos.
    En las primaveras, todos ellos
    se cubren de flores, en torno a
    la higuera.
    Y la pobre parece tan triste,
    con sus gajos torcidos, que nunca,
    de apretados capullos, se visten.
    Es por eso, que si paso a su lado,
    digo, procurando hacer dulce y
    alegre mi acento.
    Es la higuera, el más bello de
    los árboles todos del huerto.
    Si ella escucha, si comprende
    el idioma, en que le hablo,
    que dulzura, tan honda, hará nido
    en su alma sensible de árbol.
    Y quizás la noche, cuando
    el viento acaricie su copa
    embriagada de gozo, le cuente.
    Hoy a mí, me dijeron, hermosa.

    Juana de Ibarbourou Porque es áspera y fea,
    porque todas sus ramas son grises,
    yo le tengo piedad a la higuera.
    En mi huerto hay cien árboles bellos:
    ciruelos redondos, limoneros rectos
    y naranjos de brotes lustrosos.
    En las primaveras, todos ellos
    se cubren de flores, en torno a
    la higuera.
    Y la pobre parece tan triste,
    con sus gajos torcidos, que nunca,
    de apretados capullos, se visten.
    Es por eso, que si paso a su lado,
    digo, procurando hacer dulce y
    alegre mi acento.
    Es la higuera, el más bello de
    los árboles todos del huerto.
    Si ella escucha, si comprende
    el idioma, en que le hablo,
    que dulzura, tan honda, hará nido
    en su alma sensible de árbol.
    Y quizás la noche, cuando
    el viento acaricie su copa
    embriagada de gozo, le cuente.
    Hoy a mí, me dijeron, hermosa.

    Juana de Ibarbourou (uruguaya)

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  10. DERECHOS DE LOS ÁRBOLES

    «… tenemos que defender sus derechos, como los nuestros o los de los animales:

    – Tiene derecho a la vida, porque también nace.
    – Tiene derecho a ser protegido, y a gozar de sus necesidades: luz, agua, aire, espacio.
    – Tiene derecho a no ser dañado. Todo lo que ponga en peligro su vida es un asesinato (fogones, incendios de reservas o parques).
    – Tiene derecho a cumplir su ciclo, y la tala indiscriminada les niega ese derecho. Si la tala es necesaria, tiene derecho a una plantación equivalente en el mismo lugar.
    – Tiene derecho a crecer. Destruirlo siendo pequeño y sin haberse reproducido atenta contra la especie, e indirectamente contra nosotros mismos.

    Leído en: http://www.docente.mendoza.edu.ar/actos/agosto/arbol/index.htm (Fuente: http://www.educared.org.ar)

    En dicho sitio se cuenta que: «…La fiesta del Día del Árbol tiene su origen en Nebraska (Estados Unidos) por iniciativa de Sterling Norton, quien dedicó toda su vida a difundir el culto del árbol. Domingo Faustino Sarmiento en uno de sus viajes trajo (a la Argentina) esta celebración…»

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  11. El ciprés. Adolfo Pérez Zelaschi

    Crece, ciprés, hacia la altura crece
    como la verde punta de una lanza,
    asciende hacia la luz, hacia la danza
    del viento azul que tu penacho mece.

    En cada aurora se rejuvenece
    tu empeño de vivir con la esperanza
    de asir aquello que jamás se alcanza;
    inútilmente tu destino es ése.

    Inútilmente digo porque sabes
    no ya que nunca tocarás las nubes
    sino siquiera el vuelo de las aves.

    Y a pesar de saberlo subes, subes,
    hacia metas perdidas de antemano.
    Mi destino es igual. Yo soy tu hermano.

    Adolfo Pérez Zelaschi. n. 1920 Prov.Buenos Aires/Bolívar

    Leida en:

    El Soneto en la Argentina- Antonio Requeni

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  12. Por casualidad, ¿alguien sabe la canción que se cantaba con esa letra, la de Rivarola? Mi abuela solía cantarla y me gustaría volver a escucharla. Si alguien tiene un link de youtube o un link de dónde bajarla en mp3 por ejemplo… Muchas gracias a todos!

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  13. Más poemas…

    Citados en “Manifiesto del árbol que sueña ser poema.”

    …  

    En  el sueño del árbol

    La sombra se extrémese
    Con el tierno sacudimiento de las hojas.
    El día que el primer brote de árbol
    Toma impulso y emerge de la tierra.

    Rompe el almendro su semilla
    Del viento enamorada
    A donde retorna luego del primer sacudimiento
    En que sacia la sed de su deseo.

    En el primer aliento
    Cuando da inicio
    Al movimiento inicial
    De sus innumerables alas
    Tendidas como labios propicios
    Al rose de los labios del viento.
    Porque también los sueños tienen alas
    Con que ascender en su quietud.
    En esa inmovilidad aparente
    En que cantan los árboles.

    Desde el secreto de su savia
    Desde la quietud colectiva
    Del que se queda y del que se va.

    Ya se van
    Se van despidiendo
    Porque la ciudad y sus bestias
    Lo primero que hacen
    Al dominar e intervenir  la naturaleza
    Es devastar los bosques
    Para saciar su miserable sed de ganancias
    Su angurriosa codicia
    De tierra desangrada

    Árbol y viento

    Hermanos en la pradera y la empinada montaña
    Aliento comprimido de la tierra
    Sangre terrena que no puede elevarse sin su tronco
    ni descender en armonía sin sus ramas
    Que adorna en floración los valles y montañas.
    Que asombra en la semilla que lo guarda,
    En el fruto en el que todos retornamos a la vida
    Alimento y respiro de nuestro viaje,
    De nuestro peregrinaje por esta superficie
    Que alumbra el fuego que no cesa.

    El recio pino o la áspera higuera,
    La simétrica araucaria o el sauce llorón,
    El gualanday, el olmo o el poeta
    El soñador mandarino entrepiernado
    En la soledad de su tejedora iluminada.
    Siempre buscando incesante
    La luz ascensional
    Ante la imposibilidad de sostenerse
    Sobre dos alas como el pájaro
    Que fue antes de ser hombre.

    Por ello su asombro natural
    Ante el manzano
    Que prefiere sacrificar su alegre equilibrio
    Y quebrar sus ramas cargadas de bellos frutos
    Por amor a los hombres.

    LA HIGUERA. JUANA DE IBARBOUROU

    Porque es áspera y fea,
    porque todas sus ramas son grises,
    yo le tengo piedad a la higuera.

    En mi quinta hay cien árboles bellos,
    ciruelos redondos,
    limoneros rectos
    y naranjos de brotes lustrosos.

    En las primaveras,
    todos ellos se cubren de flores
    en torno a la higuera.

    Y la pobre parece tan triste
    con sus gajos torcidos que nunca
    de apretados capullos se viste…

    Por eso,
    cada vez que yo paso a su lado,
    digo, procurando
    hacer dulce y alegre mi acento:
    «Es la higuera el más bello
    de los árboles todos del huerto».

    Si ella escucha,
    si comprende el idioma en que hablo,
    ¡qué dulzura tan honda hará nido
    en su alma sensible de árbol!

    Y tal vez, a la noche,
    cuando el viento abanique su copa,
    embriagada de gozo le cuente:

    ¡Hoy a mí me dijeron hermosa!

     

    De su libro de 1919 Lenguas de diamante

     

    EL CIPRES

    Quizás nació en Judea
    Pero se ha hecho ciudadano en todos
    los cementerios de la tierra

    Parece un grito que ha cuajado en árbol
    o un padre nuestro hecho ramaje quieto
    no ampara ni cobija. Siempre clama
    por los muertos

    Y si a veces se enrosca por su tronco
    un rosal que florece en los veranos,
    como un trapense extático no siente
    la brasa de la flor sobre sus gajos

    Tiene pasta de asceta, el solitario

    O pasta de abstraído

    Pero si uno está hastiado o está triste,
    le hace bien recostarse contra el tronco
    recto y liso

    Se siente algo sedante en la mejilla
    como si dentro del leñoso tallo
    una intuición ardiente y sensitiva
    compadeciera el gesto de cansancio

    Nunca el ciprés comprenderá la risa,
    la plenitud, la primavera, el alba
    sólo se da a la angustia de los hombres
    y arrulla el sueño eterno como un aya
    es un gran dedo vegetal que siempre
    está indicando al ruido: ¡calla!

     
    LA CUNA
     
    Si yo supiera de qué selva vino
    El árbol vigoroso que dio el cedro
    Para tornear la cuna de mi hijo…
    Quisiera bendecir su nombre exótico.
    Quisiera adivinar bajo qué cielo,
    Bajo qué brisas fue creciendo lento,
    El árbol que nació con el destino
    De ser tan puro y diminuto lecho.
     
    Yo elegí esta cunita
    Una mañana cálida de Enero.
    Mi compañero la quería de mimbre,
    Blanca y pequeña como un lindo cesto.
    Pero hubo un cedro que nació hace años
    Con el sino de ser para mi hijo,
    Y preferí la de madera rica
    Con adornos de bronce.  ¡Estaba escrito!
     
    A veces, mientras duerme el pequeñuelo,
    Yo me doy a forjar bellas historias:
    Tal vez bajo su copa una cobriza
    Madre venía a amamantar su niño
    Todas las tardecitas, a la hora
    En que este cedro amparador de nidos,
    Se llenaba de pájaros con sueño,
    De música, de arrullos y de píos.
     
    ¡Debió de ser tan alto y tan erguido,
    Tan fuerte contra el cierzo y la borrasca,
    Que jamás el granizo le hizo mella
    Ni nunca el viento doblegó sus ramas!
     
    Él, en las primaveras, retoñaba
    Primero que ninguno.  ¡Era tan sano!
    Tenía el aspecto de un gigante bueno
    Con su gran tronco y su ramaje amplio.
     
    Árbol inmenso que te hiciste humilde
    Para acunar a un niño entre tus gajos:
    ¡Has de mecer los hijos de mis hijos!
    ¡Toda mi raza dormirá en tus brazos!
     

    El nido

    Mi cama fue un roble
    y en sus ramas cantaban los pájaros.
    Mi cama fue un roble
    y mordió la tormenta sus gajos.

    Deslizo mis manos
    por sus claros maderos pulidos,
    y pienso que acaso toco el mismo tronco
    donde estuvo aferrado algún nido.

    Mi cama fue un roble.
    Yo duermo en un árbol.
    En un árbol amigo del agua,
    del sol y la brisa, del cielo y el musgo,
    de lagartos de ojuelos dorados
    y de orugas de un verde esmeralda.

    Yo duermo en un árbol.
    ¡Oh amada!, en un árbol dormimos.
    Acaso por eso me parece el lecho
    esta noche, blando y hondo cual nido.

    Y en ti me acurruco como una avecilla
    que busca el reparo de su compañera.
    ¡Que rezongue el viento, que gruña la lluvia!
    Contigo en el nido, no sé lo que es miedo.

    JUANA DE IBARBOUROU

    Los pinos. Juana de Ibarbourou

    Yo digo ¡pinos! y siento
    Que se me aclara el alma.
    Yo digo ¡pinos! y en mis oídos
    Rumorea la selva.
    Yo digo ¡pinos! y por mis labios pasa
    La frescura de las fuentes salvajes.

    Pinos, pinos, ¡pinos! Y con los ojos cerrados,
    Veo la hilacha verde de los ramajes profundos,
    Que recortan el sol en obleas desiguales
    Y lo arrojan, como puñados de lentejuelas,
    A los caminos que bordean.

    Yo digo ¡pinos! y me veo morena,
    Quinceabrileña.
    Bajo uno que era amplio como una casa,
    Donde una tarde alguien puso en mi boca,
    Como un fruto extraordinario,
    El primer beso amoroso.
    Y todo mi cuerpo anémico tiembla
    Recordando su antiguo perfume a yerbabuena.

    Y si me duermo con los ojos llenos de lágrimas,
    Así como los pinos se duermen con las ramas
    Llenas de rocío.

     

    Gustavo Tatis Guerra.
    EL SOÑADOR DE BOSQUES

    Los árboles no duermen
    Através de sus sombras viajan y recuerdan
    reconocen la mano que guarda sus silencios
    y cuando la brisa pasa se inclinan a saludarla.
    Bajo la tempestad escuchan
    la agonía de los arboles viejos
    y saludan desde sus orillas inmóviles
    el sereno esplendor de la caída.

    Saben que el hombre que vino anoche y los abrazó
    guarda en su interior
    la antigua sabia de los orígenes,
    tal vez jamás vuelvan a verse
    pero el siempre llevará
    la secreta sombra de un corazón
    plantado en el viento,
    una raiz secreta
    que cada dia
    lo acercará más al cielo.

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  14. El alma del ombú. Silva Valdés

    (Poema. Poesía escolar /infantil. Árboles)

    Yo soy un árbol sin flores.
    Mis flores, al parecer,
    son tan insignificantes
    que casi no se me ven.

    Y así, soy árbol sin galas,
    mi madera no es madera ;
    sirvo mucho para sombra,
    mas no sirvo para leña.
    Sin embargo, soy el árbol
    más hermoso de estas tierras.

    En mi copa redonda,
    donde anidan las estrellas,
    se refugiaron un día
    unas cuantas canciones,
    todas de la tierra nuestra,
    arrojadas y corridas
    por costumbres forasteras.

    Y al ser un árbol sin galas,
    sin galas y sin madera
    -como lo dije al principio-
    tengo las flores más bellas,
    las de más vivos colores,
    las que perfuman la selva,
    estos cantos y estas danzas
    que en mi savia ponen fiesta.

    F. Silva Valdés, uruguayo

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    1. Leemos en http://centrotradicionalistaelombu.blogspot.com.ar/2006/01/el-omb.html:

      Ombu1

      «Su nombre científico es (Phytolacca dioica) y es una hierba gigante, originaria de los alrededores de la laguna Iberá en la provincia de Corrientes, que se difundió por toda la pampa. Alcanza un gran desarrollo en cualquier terreno, mientras que sus hojas, flores y frutos tienen propiedades medicinales, las primeras como purgante. Sus hojas, maceradas con la madera del tronco, se emplean para la fabricación de jabón

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  15. El pino verde. Fermín Estrella Gutiérrez

    Verde pino, verde pino,
    vengo a tu sombra a jugar,
    a la orilla del camino
    quiero una acequia formar.

    El agua, agüita de plata,
    pronto correrá hasta aquí,
    y una dulce serenata
    dirá sólo para mí.

    ……………..

    Verde pino, verde pino,
    los gnomos te cuidarán,
    y las ranas del camino
    de noche te dormirán.

    Fermín Estrella Gutiérrez, en el libro «La palabra y su mundo», Ed. Plus Ultra

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  16. Semana del árbol:

    «Objetivo de la semana del árbol

    Semana del Árbol

    Reestablecer el vínculo del hombre con su entorno. Promover, nuevamente, el reencuentro profundo de nuestra esencia con la de la Tierra. Sólo recorriendo este camino, podremos entender la necesidad y el deber ético de cuidar nuestro ambiente, y toda la vida que lo atraviesa.

    El árbol, símbolo de unicidad de la vida natural, representa la conexión entre el cielo y la tierra. Entro lo visible y lo oculto. Lo perenne y lo efímero.

    No importa en el país que estés, esta debe ser una iniciativa global. Si sientes en tu corazón el deseo de hacerlo, HAZLO! Planta un árbol, dona un arbol o adopta un arbol»

    Leido en: http://shedsenn.com/2012/08/26/semana-del-arbol/

    (allí, un video)

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  17. el árbol de la vida

    autora: gladys nidia chuquimarca

    aquel árbol de la vida
    que da toda tu sabiduría
    como si fuera una avenida
    en muy plena jauría
    con mi corazón a lado
    que me parece muy destrozado.

    aquella vida que fui desgastando
    cada hoja tuya se iba volando
    cada biodiversidad que iba maltratando
    tu corazón me iba odiando.

    todos esos dias de mi vida
    que te he ido maltratando

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  18. Yo busco sin pausa un poema que habla de un hombre que le pidió a su hijo que sembrara un árbol, pero éste no quiso. Al tiempo, despiden al padre de donde trabajaba, y un árbol, a la orilla del río, los cobijó.
    De que autor es y como se llama? No lo puedo ubicar. Si lo saben me lo mandarían a mi mail?
    gracias! María

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  19. El día del arból es cuando la gente siembra semillas y esas semillas se convierten en árboles grandes y frondosos que dan flores y frutas. Hay que cuidar los arbóles para la naturaleza 🙂

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  20. 2 notas relacionadas:

    ECOLOGÍA

    El número de árboles en la Ciudad es menor de lo que sugiere la OMS

    Unos 424.000 árboles están distribuidos por distintas veredas, plazas y parques porteños, según el último censo de 2011, una cifra que está por debajo del ideal de una gran ciudad y que crea una situación «preocupante» del arbolado de Buenos Aires.

    En diálogo con Télam, la ingeniera agrónoma Ana Guarnaschelli sostuvo que «el estado del arbolado es preocupante; faltan árboles en la ciudad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica como conveniente 10-15 metros cuadrados de espacio verde por habitante (m2/hab), y en la ciudad los números están bastante por debajo de eso».

    La especialista, docente de la cátedra de Dasonomía de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA), dijo que esas cifras son, según el gobierno porteño «de 6.1 m2/hab, pero otras fuentes hablan de 2.97 m2/hab».

    Según el censo, el 12 por ciento de los árboles plantados en la ciudad está en parques y plazas, y el resto en las veredas, también llamado de alineación.

    «Hay ejemplares muy añosos, en mal estado, muy descuidados, deformados y mal distribuidos porque hay zonas con mayor densidad de espacios verdes que otras»

    Ana Guarnaschelli, ingeniera agrónoma En relación con los árboles de las veredas, Guarnaschelli precisó que «la arboleda de alineación de la Ciudad tiene diversos problemas que vienen de mucho tiempo atrás y son derivados en gran parte de la incorrecta elección de especies en numerosísimos sectores de la ciudad».

    A esto se suma la existencia de «ejemplares muy añosos, en mal estado, muy descuidados, deformados y mal distribuidos porque hay zonas con mayor densidad de espacios verdes que otras», señaló.

    En este sentido, expresó que son problemas que datan de 50 o 70 años atrás: «Basta ver las dimensiones de los árboles en numerosos sitios de la ciudad».

    «En muchas calles de Recoleta y Palermo, que en promedio tienen 3-3.5 metros de ancho, hay plantados plátanos que superan los 20 metros de altura, y que se encuentran en la mayoría de los casos inclinados hacia las calles por falta de espacio, con problemas sanitarios y en mal estado«, ejemplificó.

    La experta señaló que también hay problemas con las podas ya que «se apela en muchos casos a podas de acortamiento de ramas, las cuales generan serios problemas de cicatrización de las heridas y posterior brotación de ramas con problemas de anclaje», y en este sentido señaló que «si se consideran aspectos relacionados con las podas, por ejemplo, diría que la gestión actual debería revertir este tipo de prácticas».

    En este marco, aseguró que para solucionar los problemas de la arboleda de alineación «se requiere de equipos multidisciplinarios y muy capacitados», y añadió que «a partir de lo que observo, me parece que no hay una correcta capacitación de las empresas y empleados que realizan las podas».

    Guarnaschelli señaló, como otra de las preocupaciones, que «si no se reemplazan a la brevedad muchos ejemplares de grandes dimensiones con problemas de forma y sanidad, la situación empeorará».

    Con respecto a las estadísticas oficiales que hablan de un aumento de árboles en relación a los m2/hab, la especialista expresó que las plantaciones que se hicieron en los últimos tiempos «no tuvieron un éxito del ciento por ciento y eso es fruto del descuido de los vecinos y de la gestión».

    «En algunas comunas, la 12 por ejemplo, el boom inmobiliario, el aumento de la construcción de grandes edificios ha generado que muchos de los ejemplares plantados hace seis u ocho años, hoy no existan«, enfatizó.

    Asimismo, precisó que «a partir de algunos trabajos de relevamiento que hicimos para evaluar sectores donde se realizaron plantaciones en el año 2006 aproximadamente, en algunos lugares se vio que el 40 por ciento de los árboles había fallado, en muchos casos hasta habían desaparecido las planteras originales».

    Esas desapariciones se debieron a la construcción de «accesos y entradas a grandes edificaciones. Y en otros casos fruto del mal cuidado».

    Con respecto al comportamiento de la gente con los árboles, señaló que «no hay suficiente conciencia de sus múltiples beneficios y servicios ambientales y eso hace que se practique en muchos casos podas por cuenta propia, se cuelguen carteles, tengan heridas derivadas del maltrato, y otros daños».

    Destacó que «en líneas generales no hay sentido de propiedad del ejemplar, esto es un hecho común en grandes ciudades a diferencia de otras más pequeñas. Y más aún en aquellos barrios donde predominan las oficinas, los organismos públicos, comercios».

    También muchas veces «los vecinos manifiestan rechazo a tenerlos en las veredas por problemas de alergia, lo cual es entendible, pero esos mismos árboles pasada la época de la dispersión del polen, brindan muchísimos beneficios».

    No obstante, destacó que también hay gente que «aprecia el arbolado, que sabe valorar correctamente» sus cualidades.

    Leido en: Telam
    http://www.telam.com.ar/notas/201308/29216-el-numero-de-arboles-en-la-ciudad-es-menor-de-lo-que-sugiere-la-oms.html

    SALUD
    Los beneficios de los árboles

    El principal beneficio que los árboles brindan en las ciudades es que «aportan oxígeno y reducen la concentración de dióxido de carbono a partir del proceso de fotosíntesis», aseguró la ingeniera agrónoma Ana Guarnaschelli, de la Universidad de Buenos Aires.

    Los arboles «atenúan la presencia de otros gases y sólidos en suspensión en la atmósfera y protegen de las inclemencias ambientales», continuó.

    «Concretamente dan sombra aportando alivio de las altas temperaturas y la insolación, protegen del viento y las bajas temperaturas durante el invierno, controlan erosión del suelo, absorben agua del suelo, que de otro modo se escurriría superficialmente», especificó.

    «Los árboles no necesitan la poda para estar saludables y vigorosos»
    Ana Guarnaschelli, ingeniera agrónoma También señaló otro de los aspectos beneficiosos al remarcar que «brindan barreras visuales y atenúan los sonidos; brindan espacios de recreo, esparcimiento y valorizan las propiedades».

    Sobre las podas, dijo que hay desconocimiento de la gente porque «no es necesario podar los árboles; los árboles no necesitan la poda para estar saludables y vigorosos».

    En este sentido, expresó que «los árboles se podan solamente para adecuar su forma y cuando hay ramas rotas o secas y existen peligros de rotura y caída, pero el error de conocimiento es fruto en parte de la confusión de asociar la poda de los árboles de la calle con la poda de los árboles frutales, que sí requieren poda».

    Guarnaschelli destacó que «se necesita un programa de difusión sobre lo que es un correcto manejo de las arboledas y sus beneficios», y añadió a su vez, que «muchas de las podas drásticas y lamentablemente mal hechas, que se realizan son debido al hecho de haber elegido especies incorrectas para espacios reducidos de crecimiento».

    Por este motivo «nos encontramos hoy ante la urgencia de aplicar podas intensísimas y mal ejecutadas, por ejemplo, en Avenida Coronel Díaz entre Santa Fe y Honduras», ejemplificó.

    Leido en: Telam
    http://www.telam.com.ar/notas/201308/29215-los-beneficios-de-los-arboles.html

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  21. MI AMIGO EL ÁRBOL
    Recitado Por Milonga

    Desde el inicio del mundo
    Estuviste con el hombre
    Espere no se me asombre
    Déjeme que en un segundo
    Sin pretender ser profundo
    Le cuente con mi lenguaje,
    Forma parte del paisaje
    Que rodea nuestras horas
    Y aunque hay alguno que ignora
    Limpia el aire más salvaje.

    A veces nos distraemos
    Y hasta hacemos caso omiso
    Señores pero es preciso
    Que con amor lo plantemos
    Que mucho más lo cuidemos
    Valorar si alguien lo nombra
    Disfrutemos de su sombra
    Todo el tiempo que podamos
    Y si un día lo cortamos
    Sepamos bien lo que hacemos.

    De su leña como pago
    Tenemos pruebas sobradas
    Brindándonos cocinadas
    Las carnes de un rico asado
    En inviernos destemplados
    Contra el frio nos defiende
    Dejando cuando se enciende
    Sus bellas iridiscencias
    Y suavizando inclemencias
    En fogatas resplandece.

    Es tu carne la madera
    Que nosotros consumimos
    Y que a veces destruimos
    De descomunal manera
    Sin importarnos que fuera
    Tan noble y sano tu origen
    Y que hay leyes que nos rigen
    Para proteger la especie
    Aunque algunos las desprecien
    O desconocerlas fingen.

    Con ella se hizo la cama
    Una cuna, un crucifijo
    El abanico prolijo
    Que agita una bella dama
    Una puerta, una ventana
    Un banco, silla una mesa
    Una carreta, una lesa
    El yugo y hasta la lanza
    Y el palenque en que abalanza
    Un bagual con su nobleza.

    La elegante diligencia
    Que cruzara con su porte
    La patria de sur a norte
    Llevando con su presencia
    Del pasajero la esencia
    Trashumante del destino
    Por polvoriento camino
    Transitando los confines
    Semejante a paladines,
    De madera fue, yo opino.

    Sos cálida como un regazo
    Con vos se hizo casi todo
    Y no existen muchos modos
    Para encontrarte reemplazo,
    Tan fuerte como un abrazo
    Donde el pecho se desgarra
    Sos cuerpo de la guitarra
    Trasportando su dulzura,
    Donde anida la ternura
    Cuando un sentimiento amarra.

    Letra y música: Osvaldo H (Tito) Sanguinetti
    29-08-12
    Reservados todos los derechos.

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  22. me gustan los árboles porque ellos dan hojas, frutas de naranja, manzana y muchas cosas más porque ellos soy muy importantes para mi y para ustedes también

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  23. Un libro:
    100 Arboles Argentinos
    Portada libro 100 Arboles Argentinos

    Algunos sitios con información acerca de los árboles:

    Arboles autóctonos de Argentina:
    http://arbolesautoctonos.blogspot.com.ar/

    Arboles nativos de Argentina:
    http://www.portalplanetasedna.com.ar/arboles_argentinos.htm
    (basado en «100 Árboles Argentinos» de E. Haene – G. Aparicio)

    Arboles de la Ciudad de Buenos Aires:
    http://www.conozcabuenosaires.com.ar/arboles.html

    El portal sobre árboles frutales:
    http://www.arbolesfrutales.info/

    Naranjo enano / Portal de Arboles Frutales

    Fauna y Flora de la Argentina Nativa:

    http://faunayfloradelargentinanativa.blogspot.com.ar/search/label/Flora%3A%20árboles%3A%20Gimnospermas

    http://faunayfloradelargentinanativa.blogspot.com.ar/search/label/Flora%3A%20árboles%20Angiospermas

    http://faunayfloradelargentinanativa.blogspot.com.ar/search/label/Flora%3A%20arbustos

    Arboles y Medio Ambiente (España):
    http://www.arbolesymedioambiente.es/

    PD: Con tiempo, proseguiremos la búsqueda.
    Suerte con la tarea! Saludos!

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  24. Sabiduría Popular, leyendas y Creencias sobre los Árboles:

    (del sitio http://www.arbolesymedioambiente.es/)

    «Con sus raíces en la tierra, sus troncos irguiéndose por por encima de los otros seres vivos y sus ramas y hojas cubriendo nuestras cabezas, los árboles abarcan los tres niveles de la experiencia humana. Su importancia simbólica es un tema muy frecuentado en las culturas de todo el mundo, representando la regeneración y la propia vida.

    Los árboles aparecen en muchas historias míticas sobre la creación del mundo. El Ygdasil es un fresno mitológico escandinavo que representa el cosmos y sirve de puente entre la esfera celestial y la terrenal por el que descendieron los dioses para realizar su creación

    En las Islas Tonga, al sur del océano Pacífico, se dice que los hombres son brotes nuevos del «Árbol del Mundo«, mientras que en las Islas de Almirante y en las de Banks existe la creencia de que el hombre fue creado tallándolo en el tronco de un árbol. Los Egipcios representaban a la diosa de la tierra emergiendo de un árbol del que forma parte, ofreciendo su pecho como fuente de visa.

    En el Judaísmo y por consiguiente en el Cristianismo representa tanto el árbol de la vida como el árbol de la crucifixión. Según una leyenda medieval Eva plantó una rama del Árbol de la Ciencia del Bien y del Mal sobre la sepultura de Adán que creció formando un árbol cuya madera fue utilizada para hacer la cruz donde Jesús nos dio la Vida. La misma Cábala judía representa las emanaciones de la Divinidad en un árbol: las Sephirot.

    Los Bosques fueron lugares sagrados para los pueblos Iberos. Sus Santuarios estaban en medio de arboledas, cerca de una cueva y bañados por un manantial. Ese culto a los árboles sigue perviviendo entre nosotros, como en Galicia donde se sigue plantando un roble en las Iglesias.

    El árbol es un símbolo de todo el cosmos, no sólo en sentido físico, sino también moral. Es el árbol de la Ciencia, del Bien y del Mal; es el árbol de la vida y el de la muerte; es, en definitiva, el Mundo.»

    De: http://www.arbolesymedioambiente.es/)

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  25. Plantando el árbol. Gabriela Mistral

    Abramos la dulce tierra
    con amor, con mucho amor;
    es éste un acto que encierra,
    de misterios el mayor.

    Cantemos mientras el tallo
    toca el seno maternal.
    Bautismo de luz da un rayo
    al cono piramidal.

    Le entregaremos ahora
    a la buena Agua y a vos,
    noble Sol; a vos, señora
    Tierra, y al buen Padre Dios.

    El Señor le hará tan bueno
    como un buen hombre o mejor;
    en la tempestad sereno,
    y en toda hora, amparador.

    Te dejo en pie. Ya eres mío,
    y te juro protección
    contra el hacha, contra el frío
    y el insecto, y el turbión.

    A tu vida me consagro;
    descansarás en mi amor.
    ¿Qué haré que valga el milagro
    de tu fruto y de tu flor?

    Gabriela Mistral

    Leído en: Galopando: http://galopando.bligoo.cl/tag/infantilespoesia

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  26. En la vereda de mi casa está este arbolito. Como los de la municipalidad, tras la caída por un fuerte temporal del añoso árbol que estaba antes, nunca atendieron a mi pedido de plantarme árboles, mi vecina Guillermina plantó un algarrobo que ella ha traído de su provincia natal, Salta. Entre las dos lo cuidamos, lo regamos, lo apuntalamos, lo podamos, y le vamos quitando las basuras que lamentablemente tiran los que pasan y que tienen el mal hábito de usar las planteras como tachos de basura -qué mal!, cosas de esta ciudad. Aquí se ve cómo va creciendo:

    arbolito

    arbolito creciendo

    arbolito2creciendo

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  27. Arboricultura Urbana y Medioambiente

    Sabiduría popular, leyendas y creencias sobre los Árboles

    Creencias Populares sobre Árboles

    Con sus raíces en la tierra, sus troncos irguiéndose por encima de los otros seres vivos y sus ramas y hojas cubriendo nuestras cabezas, los árboles abarcan los tres niveles de la experiencia humana. Su importancia simbólica es un tema muy frecuentado en las culturas de todo el mundo, representando la regeneración y la propia vida.

    Los árboles aparecen en muchas historias míticas sobre la creación del mundo.

    El Ygdasil es un fresno mitológico escandinavo que representa el cosmos y sirve de puente entre la esfera celestial y la terrenal por el que descendieron los dioses para realizar su creación

    En las Islas Tonga, al sur del océano Pacífico, se dice que los hombres son brotes nuevos del «Árbol del Mundo», mientras que en las Islas de Almirante y en las de Banks existe la creencia de que el hombre fue creado tallándolo en el tronco de un árbol. Los Egipcios representaban a la diosa de la tierra emergiendo de un árbol del que forma parte, ofreciendo su pecho como fuente de
    visa.

    En el Judaísmo y por consiguiente en el Cristianismo representa tanto el árbol de la vida como el árbol de la crucifixión. Según una leyenda medieval Eva plantó una rama del Árbol de la Ciencia del Bien y del Mal sobre la sepultura de Adán que creció formando un árbol cuya madera fue utilizada para hacer la cruz donde Jesús nos dio la Vida. La misma Cábala judía representa las emanaciones de la Divinidad en un árbol: las Sephirot.

    Los Bosques fueron lugares sagrados para los pueblos Iberos. Sus Santuarios estaban en medio de arboledas, cerca de una cueva y bañados por un manantial. Ese culto a los árboles sigue perviviendo entre nosotros, como en Galicia donde se sigue plantando un roble en las Iglesias.

    El árbol es un símbolo de todo el cosmos, no sólo en sentido físico, sino también moral. Es el árbol de la Ciencia, del Bien y del Mal; es el árbol de la vida y el de la muerte; es, en definitiva, el Mundo.

    Creencias Populares sobre Árboles

    El TEJO (Taxus baccata) simboliza tanto la muerte como la vida. Consagrado, en otros tiempos, a la diosa Hécate, reina de los infiernos, el Tejo se encuentra en casi todos los cementerios ingleses, representando con su follaje perenne, el triunfo de la vida eterna. En cambio en nuestros cementerios este mismo símbolo lo representa el siempre verde CIPRÉS COMÚN (Cupressus sempervirens) cuya copa puntiaguda parece querer unir la Tierra con el Cielo.

    El ESPINO (Crataegus oxiyacantha),
    en la sabiduría popular es ambivalente. Llevar ramilletes de espino en flor a una casa es predicción de una muerte en la familia, mientras que sentarse bajo el árbol en vísperas del solsticio de verano y en la víspera de Todos los Santos puede producir encantamiento.

    EL SAUCE (Salix alba) es junto con el abedul y el avellano, es uno de los mejores árboles sagrados y es un símbolo del amor no correspondido y desgraciado.

    Lleno de propiedades mágicas trae suerte el parto y en las enfermedades. Por otra parte el Sauce Blanco tienen muchas propiedades curativas (fiebre y dolor). Su uso como antipirético y sedante se debe al Ácido Salicílico de sus hojas y principalmente de su corteza lo que le llevo a ser usado durante mucho tiempo como árbol medicinal, no hace muchos años que este mismo ácido salicílico se encontró en otras especies de plantas (La Aspirea) de donde fue extraído y convertido en Ácido Acetil Salicílico con muchas menos contraindicaciones que el propio Ácido Salicílico (NACIO LA ASPIRINA A LA QUE TANTO DEBEMOS)

    «ES VIMER DE S´HORT DES CORREU DE MANACOR (MALLORCA)».

    No puedo dejar pasar este apartado de árboles mágicos sin mencionar este árbol sagrado de Mallorca, pequeño Sauce Mimbrero (Salix viminalis) SANADOR de la familia Magí Sureda propietarios de «s’Hort des Correu» de Manacor, una finca situada a la salida de la villa, por la carretera que conduce a Portocristo. Desde hace mas de sesenta años el VIMER que habita en su corral es objeto de prácticas mágicas de sanación la noche de San Juan. Alrededor de las cinco de la mañana comienzan los ritos mágicos de este árbol sagrado que cura hernias a niños menores de 14 años En el momento que comienza a salir el Sol los niños son pasados por el arco de las flexibles ramas del VIMER. Se frota su vientre herniado para hermanar el Mal con la fuerza mágica del árbol del VIMER.

    LA ENCINA DE SON NET (MALLORCA)(Quercus ilex) S’Auzina Senyora de Puigpunyent (Mallorca)

    ha sido y es un árbol venerado por mágico y centenario. Todavía en nuestros días, episodios como las apariciones de nuestra Santa Madre de Dios en lo alto de la encina de Son Net continúan la ancestral tradición del árbol revelador y del árbol Santo.

    EL SERBAL DE CAZADORES (Sorbus aucoparia)
    es un amuleto contra las brujas. En el mes de Mayo en la Isla de Man, se atan cruces protectoras de serbal a la cola de las vacas para protegerlas de influencias diabólicas.

    EL FRESNO (Fraximus angustifolia)
    tiene propiedades curativas y protectoras. Su madera cura las verrugas y si un niño pasa bajo un arbolito hendido que ya ha sido recompuesto se cura del raquitismo y la hernia.

    EL SAUCO (Sambucus nigra).
    A pesar de sus propiedades curativas y medicinales es un árbol maldito ya que cuenta la leyenda que judas se ahorcó en el. Las brujas se transformaron en saúcos y se dice que si se les hace una herida su madera sangra.

    CIPRÉS COMÚN (Cupressus sempervirens).
    El árbol de la bienvenida y de la amistad para los Romanos representa para nosotros la inmortalidad y por eso jalonan nuestros cementerios representando el triunfo de la vida sobre la muerte.

    EL TAN FAMILIAR PLATANO (Platanus orientalis).
    Encarnaban para los griegos «La Paz» y era bajo su apreciada sombra donde Socrates reunía a sus discípulos para impartir las clases.

    El Garoé de la Isla de Hierro «El Árbol Fuente de Agua».
    Fue durante una escala en la Isla de Hierro (Canarias) en ruta hacia América, cuando el Dominico Las Casas se interesó por la cultura de los indígenas, los Guanches, ya casi desaparecidos en el siglo XVI. Los Guanches emparentados con los beréberes dedicaban un culto particular a un árbol, el Garoé, que les proporcionaba agua dulce en abundancia. Este árbol que parecía mítico, existió hasta que fue arrancado de cuajo por un huracán en 1610. Su existencia está atestiguada por una plaza conmemorativa y por los seis pozos a cielo abierto que recogían su agua. Se encontraba alrededor de los 1.000 metros de altura cerca de Tiñor, en la vertiente que recibe el viento. Curiosamente su desaparición coincidió con la extinción de la civilización guanche en la Isla de Hierro, QUIZÁS AL VERSE PRIVADA DE SUS RAÍCES.

    Olivos Milenarios de los viejos Montes de la Isla de Mallorca, Refugio de «Negrets»
    o «Cuques»

    Hay árboles que en TODAS las culturas de este nuestro Mundo. Están considerados como divinos.

    El Roble, árbol sagrado de los Druidas Celtas, es el símbolo de la fortaleza y es un árbol protector .

    El cedro fue venerado por los antiguos cristianos de Líbano. Los Judíos y Musulmanes también lo veneran pero cada uno de ellos por razones distintas.

    La Madera de una variedad de Acacia del desierto de Egipto fue utilizada según la Biblia para construir los objetos mas sagrados y secretos, el Tabernáculo y el Arca de la Alianza (Poderosa arma de Guerra).

    Para los Budistas el BO es un árbol sagrado ya que Gautama Buddha meditaba sentado bajo sus ramas cuando descubrió el nirvana, y el árbol Bayan es adorado por los Hindúes que creen que Bahma se transformó en él.

    En la antigua Roma, durante la primavera, un pino que simbolizaba a ATTIS, la diosa Cibeles, del amor y de la fertilidad (NACIDA DE UN ALMENDRO) era llevado hasta su templo, en el monte palatino.

    El culto a los árboles está muy presente todavía en la simbología cristiana. Los
    Tilos han sido acompañantes mudos de muchas Iglesias en nuestra Europa durante cientos de años.

    Leído en: «Sabiduría popular, leyendas y creencias sobre los Árboles»

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  28. Parábola: El árbol generoso

    Autor: (basado en el libro The Giving Tree/Shel Silverstein)

    «Había una vez un árbol… Y el árbol amaba a un niño… Y el muchacho venía todos los días y cogía sus hojas. Y con ellas hacía coronas e imaginaba ser el rey del bosque… Y trepaba por el tronco… Y se colgaba de sus ramas… Y comía manzanas… Y jugaba al escondite… Y cuando se cansaba se dormía a la sombra… Y el muchacho amaba muchísimo al árbol… Y el árbol era feliz… Pero el tiempo pasaba… Y el muchacho crecía… Y el árbol, con frecuencia, estaba sólo…

    Un día, el muchacho se acercó al árbol, y éste le dijo:
    — Ven, muchacho, trepa por mi tronco y colúmpiate en mis ramas y come manzanas y juega a mi sombra y sé feliz…
    — Soy demasiado grande para trepar y jugar —dijo el muchacho—. Necesito dinero. ¿Puedes darme un poco de dinero?
    — Lo siento —dijo el árbol—, pero no tengo dinero. Sólo tengo unas hojas y manzanas. Coge las manzanas, muchacho, y véndelas en el mercado de la ciudad. Entonces tendrás dinero y serás feliz…

    En seguida el muchacho subió al árbol, cogió sus manzanas y se las llevó. Y el árbol fue feliz… Y el muchacho se alejó. Se fue muy lejos sin poder ver al árbol… Y el árbol estaba triste…

    Y un buen día, el muchacho volvió… Y el árbol se estremeció de alegría y dijo
    — Ven, muchacho, y trepa por mi tronco y colúmpiate en mis ramas y… se feliz.
    — Estoy demasiado atareado —dijo el muchacho— para trepar por tu tronco. Necesito una casa para cobijarme. Necesito calor como el comer. Quiero una esposa, quiero tener hijos y por eso necesito una casa.
    — Yo no tengo casa —dijo el árbol—. El bosque es mi casa. Pero tú puedes cortar mis ramas y construir una casa. Entonces serás feliz…

    Y el muchacho cortó sus ramas… Las llevó para construir una casa… Y el árbol era feliz… Y el muchacho se fue lejos y no pudo ver al árbol por mucho tiempo…

    Y cuando el muchacho regresó…, el árbol no podía ni hablar, embargado por la emoción.
    — Ven, muchacho —balbuceó—, ven a jugar.
    —Soy demasiado viejo y asediado por la tristeza para jugar —dijo el muchacho—. Necesito un barco que me lleve muy lejos de aquí. ¿Me puedes dar un barco?
    — Corta mi bronco y fabrica un barco —dijo el árbol—. Luego podrás navegar hasta playas lejanas… y serás feliz…

    Y el árbol era feliz…, aunque no enteramente… Le faltaba compañía… Y después de mucho tiempo…, el muchacho regresó de nuevo.
    — Lo siento, muchacho —dijo el árbol— pero no me queda nada… Mis manzanas desaparecieron.
    — Mis dientes son demasiado débiles para comer manzanas —dijo el muchacho—.
    — Mis ramas… han desaparecido —dijo el árbol—. Ya no puedes columpiarte en ellas.
    — Soy demasiado viejo para columpiarme en ellas—dijo el muchacho—.
    —Mi tronco ha desaparecido —dijo el árbol—. Ya no puedes trepar.
    — Estoy demasiado cansado para trepar —dijo el muchacho—.
    — Lo siento—sollozó el árbol—. Quisiera darte algo… Pero ya no me queda nada. Sólo un tronco. Lo siento…
    — Ahora necesito muy pocas cosas —dijo el muchacho—. Sólo un lugar tranquilo para sentarme y descansar… Estoy demasiado cansado…
    — Bueno —dijo el árbol enderezándose todo lo que pudo con gran esfuerzo—.
    — Bueno, siéntate. Un viejo tronco sólo sirve para asiento y descanso… Ven, siéntate.

    Y el muchacho lo hizo… Y el árbol era feliz, feliz, feliz.»

    Leído en: http://www.parabolas.org/parabolaelarbolgeneroso.htm

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  29. El árbol que da o el árbol generoso (The Giving Tree), publicado en 1964, es un libro infantil escrito e ilustrado por Shel Silverstein. Este libro se ha convertido en uno de los más famosos de Silverstein y ha sido traducido a más de 30 idiomas.

    «Había una vez un árbol que amaba a un pequeño niño. Todos los días el niño venía y recogía sus hojas para hacerse con ellas una corona y jugar al rey del bosque. Subía por su tronco, se mecía en sus ramas y comía manzanas. Jugaban juntos a la escondida y cuando se cansaba, el niño dormía a su sombra.

    Y el niño también amaba al árbol y el árbol era feliz.

    El tiempo pasó, el niño creció y el árbol solía quedarse solo esperándolo. Un día, el árbol vio venir al niño.

    –Vení niño, subite a mi tronco, hamacate en mis ramas, comé mis manzanas, jugá bajo mi sombra y sé feliz -le dijo.

    –Ya soy muy grande para trepar y jugar -dijo el niño- yo quiero comprar cosas, divertirme. Necesito dinero. ¿podés darme plata o me voy?

    –Lo lamento, -dijo el árbol- sabés que plata no tengo, sólo hojas y manzanas. Agarrá mis manzanas y vendelas en la ciudad… tal vez así consigas la plata que querés.

    El niño se subió al árbol, arrancó todas las manzanas, las cargó en una cesta y se volvió a alejar. Y el árbol se quedó feliz.

    Pero pasó mucho tiempo, el niño no volvía y el árbol lo esperaba triste. Hasta que un día regresó y el árbol agitó alegremente sus hojas.

    –Vení niño, subite a mi tronco, hamacate en mis ramas, jugá bajo mi sombra y sé feliz -le dijo.

    –Necesito una casa que me sirva de abrigo -le contestó el niño-, quiero conseguirme una esposa y tener hijos. Es una casa lo que necesito, ¿tenés una casa para darme?

    –Yo no tengo una casa -le dijo el árbol-, mi hogar es el bosque, pero podés cortar mis ramas y usarlas para hacer tu propia casa. Entonces serás feliz.

    El niño cortó todas las ramas, se las llevó y se construyó una casa hermosa. Y el árbol se quedó feliz.

    Volvieron a pasar muchos años sin que el niño regresara, hasta que un día volvió a visitarlo… el árbol se puso tan feliz que apenas pudo hablar.

    –Vení, niño -le susurró- acercate y jugá.

    –Estoy muy viejo y triste para jugar -le contestó- quisiera tener un bote y navegar lejos de aquí, ¿vos tenés un bote para mí?

    –Un bote no tengo -le respondió el árbol-, pero podés cortar mi troco y navegar sobre él, si eso te hace feliz.

    El niño cortó el tronco, lo ahuecó y se hizo un bote. Navegó lejos y el árbol se quedó feliz… o quizás no. Volvieron a pasar algunos años hasta que el niño regresara a ver al árbol.

    –Lo lamento, niño -lo recibió el árbol- pero ya no me queda nada para ofrecerte… manzanas ya no tengo…

    –Mis dientes ya están débiles para manzanas -le contestó el niño.

    –Tampoco me quedan ramas, ya no hay cómo hamacarse en mí.

    –Estoy muy viejo para las hamacas.

    –Ni el tronco me queda, niño, ¿cómo te vas a trepar?

    –Estoy muy cansado para trepar -le contestó el niño.

    –Quisiera poder darte algo… pero ya no me queda nada. Me he convertido en un viejo leño trunco en medio del bosque… lo lamento -dijo el árbol.

    –Yo ya no necesito mucho ahora -respondió el niño- apenas un lugar tranquilo para reposar… estoy muy cansado.

    –¡Fantástico! -dijo el árbol reanimándose- un viejo leño trunco es lo que necesitás para sentarte y descansar. Vení, niño, sentate sobre mí.

    Y el niño se quedó sentado contemplando el bosque. Y el árbol se quedó feliz.

    FIN»

    Leído en: BiblioPequeItinerante:

    http://bibliopequeitinerante.blogspot.com/2013/04/cuento-el-arbol-generoso-de-shel.html

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  30. Desde Panamá:

    Mi Arbolito, por Hersilia Ramos de Argote

    En el patio de mi casa
    he sembrado un arbolito;
    si lo vieras cómo crece
    tan alegre y tan erguido.

    Yo lo riego diariamente
    con cuidado y con amor
    y le arranco las malezas
    que lo ocultan ante el sol.

    Pronto, pronto ha de ser grande
    y entonces, con gran placer,
    estudiaré mis lecciones
    bajo la sombra que él dé.

    Del Libro: Versos Para Niños y Por Los Caminos De Un Apostolado
    Hersilia Ramos de Argote, Julio, 1950
    En: http://panamapoesia.com/pt26ninos08.htm

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  31. «El ginkgo. Eduardo Galeano

    Es el más antiguo de los árboles. Está en el mundo desde la época de los dinosaurios. Dicen que sus hojas evitan el asma, calman el dolor de cabeza y alivian los achaques de la vejez.

    También dicen que el ginkgo es el mejor remedio pata la mala memoria. Eso sí que está probado. Cuando la bomba atómica convirtió a la ciudad de Hiroshima en un desierto de negrura, un viejo ginkgo cayó fulminado cerca del centro de la explosión. El árbol quedó tan calcinado como el templo budista que el árbol protegía. Tres años después, alguien descubrió que una lucecita verde asomaba en el carbón. El tronco muerto había dado un brote. El árbol renació, abrió sus brazos, floreció.

    Ese sobreviviente de la matanza sigue estando ahí.

    Para que se sepa.»

    Eduardo Galeano

    Leído en: http://www6.rel-uita.org/contratapa/galeano-1.htm

    Allí dice: (*) Textos pertenecientes al libro del autor «Bocas del tiempo». México, Siglo XXI, 2004. 347 p.

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  32. ÁRBOL QUE RECUERDA. Eduardo Galeano

    «Siete mujeres se sentaron en círculo.

    Desde muy lejos, desde su pueblo de Momostenango, Humberto Ak´abal les había traído unas hojas secas, recogidas al pie de un cedro.

    Cada una de las mujeres quebró una hoja, suavemente, contra el oído. Y así se abrió la memoria del árbol:

    Una sintió el viento soplándole la oreja.
    Otra, la fronda que suavecito se hamacaba.
    Otra, un batir de alas de pájaros.
    Otra dijo que en su oreja Ilovia.
    Otra escuchó algún bichito que corría.
    Otra, un eco de voces.
    Y otra, un lento rumor de pasos.»

    De su libro «Bocas del Tiempo».
    Leído en: En: Cantatas: ttp://pacoweb.net/Cantatas/Bocas.htm

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  33. El Ceibo: Es un árbol originario de América, especialmente de Argentina (zona del litoral), Uruguay (donde también es flor nacional), Brasil y Paraguay.

    La flor de ceibo, también denominada seibo, seíbo o bucaré, fue declarada flor nacional argentina por Decreto del Poder Ejecutivo de la Nación Nº 138474/42 (23 de diciembre de 1942).

    Crece en las riberas del Paraná y del Río de la Plata, pero también se lo puede hallar en zonas cercanas a ríos, lagos y zonas pantanosas. Pertenece a la familia de las leguminosas. No es un árbol muy alto y tiene un follaje caduco de intenso color verde. Sus flores son grandes y de un rojo carmín. Su tronco es retorcido. Sus raíces son sólidas y se afirman al suelo contrarrestando la erosión que provocan las aguas. Su madera, blanca amarillenta y muy blanda, se utiliza para fabricar algunos artículos de peso reducido. Sus flores se utilizan para teñir tela.

    Más info: https://acuarela.wordpress.com/2010/11/22/dia-de-la-flor-nacional/

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  34. Refranes que tienen a los árboles como protagonistas

    Publicado por Tes Nehuén 20 de septiembre de 2018

    … Cuando pensamos en los árboles no podemos evitar que nos vengan valores como la fortaleza, la longevidad y la firmeza. Así, imaginarnos como árboles es una forma de asumir nuestra capacidad para sobrevivir aunque duras tormentas arrecien nuestra casa. Algunos de los refranes que tienen a los árboles como protagonistas hacen alusión a esa fortaleza y al crecer de forma sana.

    …hay refranes que hablan sobre la caída, sobre la pérdida del poder y la firmeza… cuando alguien pierde su posición o su situación de poder enseguida le llueven críticas, generalmente maliciosas, que intentan terminar de hundirlo en su miseria…

    otro refrán aconseja no regodearse por las dificultades o las miserias de los otros…
    otro vinculado a la caída … que intenta expresar que todos vamos a morir, por lo que lo mejor que podemos hacer es disfrutar de la vida sin preocuparnos demasiado. …

    Otros refranes sobre árboles y madera están relacionados con el esfuerzo

    Otra gran cantidad de refranes que tienen a los árboles como protagonistas hacen alusión a la herencia.

    … actitudes que se heredan. De alguna forma se espera que si una persona es de determinada forma, su descendencia se le parezca…

    Los árboles forman parte de nuestra herencia. Nos relacionamos con ellos desde que somos niños y los tomamos como referencia aunque no nos parezcamos tanto a ellos…

    https://www.poemas-del-alma.com/blog/especiales/refranes-tienen-arboles

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  35. MI JACARANDÁ
    autor Osvaldo Arena

    El árbol
    que ayer planté
    no lo necesito
    ya imaginar
    de azul
    lo veo pintarse
    en cada primavera
    a mi jacarandá.

    La sombra
    que tanto ansié
    hoy la puedo
    al fin gozar
    bajo la copa
    tupida, verde
    azul florida
    de mi jacarandá.

    Lo sueños,
    que también planté
    un puñado de ilusiones
    nada más
    entre sus
    flores caídas
    los abriga
    mi jacarandá.

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  36. La Llamada de los Arboles, Tagore

    Tú que pasas y levantas contra mi tu brazo, que inconsciente me zarandeas, antes de hacerme daño, mírame bien.

    Yo soy el armazón de tu cama, la madera de tu barca, la tabla de tu mesa, la puerta de tu casa, la viga que sostiene tu techo, la cama en que descansas.

    Yo soy el mango de tu herramienta, el bastón de tu vejez, el mástil de tus ilusiones y esperanzas.

    Yo soy el fruto que te nutre y calma tu sed, la sombra bienhechora que te cobija contra los ardores del sol, el refugio bondadoso de los pájaros que alegram con su canto tus horas y que limpian tus campos de insectos.

    Yo soy la hermosura del paisaje, el encanto de tu huerta, la señal de la montaña, el lindero del camino.

    Yo soy el calor de tu hogar en las noches largas y frías del invierno, el perfume que embalsama a todas horas el viaje que respiras, el oxígeno que vivifica tu sangre, la salud de tu cuerpo y la alegría de tu alma; y hasta al fin, yo soy el ataúd que te acompaña al seno de la tierra.

    Por todo eso, tú que me miras, tú que me plantaste por tu mano, tú que me diste el ser y puedes llamarme hijo… óyeme bien, mírame bien… ¡y no me hagas daño

    Tagore

    https://santuariodelalba.wordpress.com/2016/10/25/el-culto-a-los-arboles/

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  37. vía blocdejavier

    Creo que nunca llegaré a ver
    un poema tan bello como un árbol.

    Un árbol cuya boca hambrienta se aprieta
    contra el pecho fluyente de la dulce tierra;
    Un árbol que mira a Dios todo el día
    y levanta sus brazos frondosos para rezar
    Un árbol que en verano puede llevar
    un nido de petirrojos en el pelo;
    En cuyo pecho la nieve ha yacido;
    que vive íntimamente con la lluvia
    Tontos como yo hacen poemas
    pero solo Dios puede hacer un árbol.

    Autor: Joyce Kilmer

    Leído en: https://blocdejavier.wordpress.com/2019/05/03/arboles/ (allí, ilustrado)

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